Luchando por un sueño. La historia futbolística de Rene Conversi
Rene comenzó su trayectoria en el mundo del fútbol a los 12 años como delantero en el equipo de su vecindario, Santa Fe United. Ahí, fue entrenado por dos grandes entrenadores como lo fueron Victor Ledezma y Miguel Cabrera. Aunque inició su carrera deportiva un poco más tarde que algunos de sus compañeros, su progreso fue notoriamente rápido y exitoso, a pesar de enfrentar un desafiante comienzo en el equipo, ya que competía con jugadores de 15 años, y los partidos eran derrota tras derrota. Sin embargo, pudo demostrar sus habilidades marcando el único gol para su equipo y así poder seguir su apasionado amor por este maravilloso deporte.
De la escuela de fútbol a la gloria colegial
Un año después de que Rene debuta en la primera escuela de fútbol en la que jugó, atrajo la atención de quienes se convertirían en sus nuevos entrenadores. Daniel De Oliveira ex-jugador de la Vinotinto, Ceferino Bencomo ex-jugador profesional del Caracas F.C. y Jhonny Barreto ex-jugador profesional del Caracas, Madeirense, etc. Estos entrenadores creyeron en su potencial y depositaron toda su confianza en él al llevarlo a un nuevo proyecto: jugar en la Liga Colegial de Caracas con el Colegio Jefferson. Durante dos años consecutivos, Rene logró ser campeón con ese increíble equipo en ambas temporadas, y en una de ellas se destacó como el máximo goleador y la revelación del año en la liga, lo que lo llevó a su preselección para represantar al Estado Miranda en unos Nacionales.
En busca del sueño futbolístico
Después de experimentar el triunfo como campeón, a los 14 años Rene se vio en una situación inesperada: quedó sin equipo. El Colegio Jefferson no tenía un equipo disponible para su categoría en ese momento, lo que lo llevó a buscar nuevos desafíos. A los 14 años, logró asegurar un lugar en el equipo Sub-20 de la Liga Lides de Caracas con La Lagunita F.C. Aunque no se coronaron campeones en esa temporada, le brindó la oportunidad de seguir desarrollando sus habilidades como jugador.
Al finalizar la temporada, Rene decidió probar suerte en una prueba con el Caracas F.C. Compitió con más de 7.000 jóvenes aspirantes, siendo uno de los 7 seleccionados. En este proceso, volvió a encontrarse con Ceferino Bencomo, su antiguo entrenador. Sin embargo, su sueño no pudo perdurar mucho tiempo debido a las complicaciones en cuanto al transporte para asistir a los entrenamientos.
Triunfos, cacrificios y el camino hacia su sueño
A los 15 años, Rene continuaba persiguiendo su sueño y decidió probar suerte en el Central Madeirense. En este nuevo camino, tuvo la oportunidad de conocer a sus entrenadores, Alfredo Bedetti e Isaac Ramos, quienes eran ex-jugadores profesionales. Este fue el comienzo de su historia en el club que se convertiría en el equipo de sus amores y su familia.
Con el Central Madeirense, Rene logró ganar todos los campeonatos locales que se disputaban en ese momento en Caracas, incluyendo la Cesar Del Veccio, Distrital, Asociación, Liga Bolivariana, Torneo Ibérico, y participaciones como la Copa Venezuela. Rene destacó por su desempeño y habilidad para marcar goles en todas las ligas, incluso en su propia categoría y en la Sub-20, lo llevaron a ser seleccionado para representar a Distrito Capital en un campeonato nacional.
A pesar de ser uno de los máximos goleadores del torneo, llegaron a la final y sufrieron una derrota en una tanda de penaltis. En su tiempo con Madeirense, Rene cosechó numerosos trofeos, aunque también enfrentó desafíos y derrotas en finales. Sin embargo, esto no lo desanimó en su búsqueda incansable de alcanzar su objetivo.
De Venezuela a Argentina: El Viaje de Rene
Después de cuatro exitosas temporadas en su equipo, a Rene se le presentó la oportunidad de explorar nuevos horizontes y desafíos en otro país: Argentina. Desde hace tiempo, uno de sus sueños más grandes había sido jugar allí, así que se embarcó en esta emocionante aventura llevando consigo una maleta cargada de sueños.
En Argentina, se unió a la Academia MacAllister, donde experimentó un enfoque de fútbol completamente diferente y una nueva visión del juego. Fue en este lugar donde la posición en el campo cambió de Rene, pasó de delantero goleador a desempeñarse como lateral derecho. Después de un tiempo, tuvo la oportunidad de hacer pruebas con el equipo y atrajo la atención de uno de los entrenadores de las selecciones juveniles de River Plate. A pesar de su destacado rendimiento y su entrega en el campo, Rene comenzó a experimentar dolores desconocidos que afectaron su capacidad para jugar al máximo nivel. Lamentablemente, esta lesión frustró temporalmente su sueño de jugar en River Plate. A pesar de que no terminó como quería, logró cosechar buenas amistades y conocer a grandes celebridades del fútbol Argentino.
Tras esta experiencia en el extranjero, Rene regresó a su país natal con 19 años y a pesar de su lesión persistente fue llamado por el Club Centro Italo, que en ese momento competía en la primera división de Venezuela. Aunque pasó las pruebas de ingreso, era consciente de la gravedad de su lesión y entendió que debía tomar un camino diferente en ese momento.
Renaciendo en Peñarol
Después de su pruebas por el Club Centro Italo, Rene aún sabiendo de su lesión quería seguir jugando y decidió buscar una oportunidad en el Club Peñarol, que en ese momento competía en la Segunda División de Venezuela. Fue allí donde Rene conoció al entrenador uruguayo Pocho Mena, quien lo recibió con los brazos abiertos. A pesar de no lograr ganar campeonatos en Peñarol, Rene pudo construir valiosas amistades durante su tiempo en el club.
Rene nunca se rindió
Después de jugar durante dos temporadas en el Club Peñarol, Rene tenía 20 años y ese año no salió ninguna competencia para el equipo. Debido a esto, se vio en la necesidad de buscar un nuevo equipo que le ofreciera una oportunidad. Decidió embarcarse en un nuevo proyecto, esta vez jugando en la Tercera División con la Universidad Nacional Abierta (UNA) donde fue entrenado por su entrenador Julio Lazo ex-jugador.
Colgando los guayos
A los 21 años, Rene se encontraba en un dilema: debía decidir entre continuar persiguiendo su sueño en el fútbol o dedicarse a cursar una carrera universitaria. Optó por una perspectiva menos intensa en el fútbol y a su vez sacar una carrera profesional. Así que, se unió al Club Deportivo Municipal El Hatillo para jugar en la Tercera División. Fue recibido por el entrenador y presidente del club, Jesús Ortiz.
Más allá de los 90 minutos. Una vida dedicada al fútbol
A pesar de tener 33 años en la actualidad, Rene sigue siendo un jugador activo, participando en torneos amateurs. Según él, «la única manera de que puedan cortarte tus sueños, es si dejas de creer en ellos».
Para Rene, el fútbol no es simplemente un deporte, sino un estilo de vida que perdurará a lo largo de su vida.
De la determinación a la inspiración
Esta historia está marcada por una determinación inquebrantable y una pasión indestructible por el fútbol. A lo largo de los años, Rene experimentó el éxito y el fracaso, pero lo que nunca cambió fue su firme compromiso con su sueño. A pesar de los obstáculos, las lesiones y los desafíos, nunca se rindió.
Hoy en día, Rene ha llegado a un punto en su vida en el que quiere dar un paso más allá. Quiere utilizar su experiencia, sus altibajos y su profundo amor por el fútbol para inspirar y ayudar a los más jóvenes a alcanzar sus propios sueños a través de Invictus Football Academy. Su historia es un testimonio de que la perseverancia y la pasión pueden abrir puertas y que el camino hacia el éxito está lleno de lecciones valiosas.
Rene ahora se ve a sí mismo como un mentor y un guía para las generaciones futuras de futbolistas, y su historia es un recordatorio inspirador de que nunca debemos dejar de perseguir nuestros sueños y de que siempre hay una oportunidad para hacer una diferencia en la vida de los demás.